La micropunción ayuda a nuestra piel, a estimular los fibroblastos, y así, produce colágeno y elastina que nos ayuda a reafirmar y rejuvenecer la piel.
Dependiendo del objetivo deseado podemos aportar luminosidad, mejorar marcas en la piel, atenuar, manchas…
En este tratamiento, lo aconsejable son seis sesiones en intervalos de entre 15 y 30 días.